Eslaseando Ámsterdam
Por Lena
Como sabéis (y si no lo sabéis, os lo digo yo), Holanda es uno de los países más liberales de Europa en cuanto a temas de sexualidad y, en consecuencia, su capital también lo es. Por dos motivos principales:
Primero, la legalización de la prostitución y su localización en escaparates del famoso “Barrio Rojo”. Todo un espectáculo. Doy fe. (Aunque para lo que nos interesa, aquí hombres no había... al menos no de ese lado del escaparate.)
Segundo, que se permite desde 2001 el matrimonio entre personas del mismo sexo. Como dijo mi profe de Derecho Penal, “aunque no haya que ser muy optimistas porque hayan salido por mayorías simples no muy grandes, una vez aprobadas, las leyes no suelen volver atrás, van colando en la sociedad, contribuyen a desactivar los prejuicios, y la sociedad las va a aceptar”. Es decir, que en la sociedad holandesa la homosexualidad y la bisexualidad están un poquito más normalizadas que aquí y, por ende, hay más recursos para las y los slashers al andar por la calle.
En Ámsterdam se encuentra el único monumento del mundo a los homosexuales caídos en la lucha por la causa, el Homomonumento, que está formado 3 triángulos de mármol que representan el pasado, presente y futuro y que a su vez conforman otro triángulo. El triángulo rosa fue el símbolo con que se marcaba a los homosexuales en los campos de concentración nazis durante la segunda guerra mundial.
Justo al lado del Homomonumento está el PinkPoint (www.pinkpoint.org), el centro de información turística gay de Ámsterdam. Aparte de información sobre locales de ambiente gay y eventos, mapas y revistas, tienen camisetas, chapas, tazas torcidas en las que pone “I’m so gay I can’t even drink straight”... y un largo etcétera.
Y ya entrando en la materia del Slash propiamente dicha, nos vamos al Barrio Rojo, el más turístico y en el que se encuentra porno por doquier. Decir que das dos pasos y te encuentras porno se queda corto. Un paraíso para los sentidos xD.La calle de la Zona Roja o Red Light District más llena de sex-shops y escaparates y tiendas “especiales” es Warmoesstraat, la calle del cuero. En esta calle hay de todo y para todos los gustos, incluidos aquellos a los que os vaya el cuero y el sadomaso. Como las imágenes valen más que mil palabras, aquí van...
Cuero... y pollas uniformadas.
Más cuero.... y un sex-shop gay.
La Condomerie, donde vendían condones de todos los tipos, formas y sabores.
Mención aparte merece el Erotic Museum, que también está en la Warmoesstraat. La verdDa, mucho porno, incluso en dibujos animados, pero de gay no tienen nada de nada. Lésbico sí, fíjate tú por donde. Lo más slash que hay es esta estatuilla, que yo intenté emular luego, sin duda con menos pericia xD.
En Ámsterdam celebran varias fechas relacionadas con lo gay. El 30 de Abril es el día de la Reina, y montan una fiesta al lado de Homomonumento con desfile de Drags y música, entre otras cosas. El último sábado de junio se celebra el día del Orgullo LGTB (Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales): aquí la fiesta dura tres días y hay desfiles de chicos guapos y musculosos y también actuaciones. La primera semana de agosto es el Ámsterdam Gay Pride (www.weareproud.nl). Durante unos días modifican la frecuencia del transporte público por la gran cantidad de gente que va. A finales de octubre se celebra el Ámsterdam Leather Pride (www.leatherpride.nl), que dura diez días enteritos. Y el 1 de diciembre se realizan actuaciones para recaudar fondos para la lucha contra el SIDA.
En Reguliersdwarsstraat, la calle del pecado, se ven algunas banderas del arcoiris. Hay locales de ambiente gay, incluidos un coffee-shop y una peluquería (que lo vi yo con mis propios ojos, y mi cámara también lo vio). En los alrededores de esa calle y en la zona de Rembrandtplein hay muchos clubes para gays (y slashers, si te dejan entrar xD).
En resumen, que Ámsterdam es una ciudad muy gay, donde el slash salta a la vista si sabes dónde mirar. La meca. Una recomendación: no vayáis con vuestra madre ni con vuestros hijos, pero no os perdáis el Ámsterdam Slash.hijos, pero no os perdáis el Ámsterdam Slash.
