REVOLUCIÓN 9

 


Dices que quieres una revolución. Bien, sabes, todos deseamos cambiar el mundo. Me dices que es evolución; bien, sabes, todos deseamos cambiar el mundo. Pero cuando hablas de destrucción ya sabes que no puedes contar conmigo.

“Revolution”, The Beatles.


Número nueve, número nueve, número nueve.

“Revolution 9”, The Beatles.

 


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Es la primera vez que empiezo a escribir un Editorial en un avión. No sé dónde voy a terminarlo –tal vez en vuelo, tal vez en casa-, pero antes de que estas palabras lleguen a vosotras ya habremos comentado en repetidas ocasiones lo mucho o poco que nos ha gustado "Harry Potter y el Príncipe Mestizo" (titulada en España como “Harry Potter y el Misterio del Príncipe”). Asistí al estreno en Londres, de lo cual dí cuenta en nuestra quedada online del día 16 de julio en Segunda Dosis –aún activa, para quienes queráis pasaros por allí a comentar la jugada. Suelo ir cada cierto tiempo, una vez al año, o cada dos, para quitarme el mono UK, sobre todo. Quien me conoce bien ya sabe que hay que dejarme ir: allí frikeo, veo a los amigos, hago mi vida, en fín, me desahogo; y luego vuelvo, mansa y tranquila, de nuevo al redil. Hasta la próxima, en la que volveré a las andadas, pero con eso se aseguran una temporada en la que no daré la coña con “cuánto me apetece ir a Londres” y “cuánto echo de menos…” (puntos suspensivos que relleno en su momento con el nombre de una persona, lugar o actividad aborigen).

Esas mismas amigas -aunque quizás ya no sea ningún secreto-, son conscientes de mi admiración e inclinación hacia el fandom inglés. Es de dominio público lo mucho que amo al fandom hispano, pero es posible que no todo el mundo sepa que desde hace tiempo estoy vinculada también a este otro. No era una información que hasta ahora cumpliera función estructural en el marco de Intruders ni de este fandom, por tanto nunca creí que el comentario fuera necesario. Sin embargo, en esta ocasión quisiera exponer las conclusiones a las que he llegado después de mi progresiva integración en dicho entorno, y de mi trato con sus integrantes. ¿Por qué? ¿Por qué precisamente ahora? Porque necesitamos re-evaluar lo que estamos haciendo en el nuestro. En mi Editorial anterior consignaba los que en mi opinión son nuestros puntos fuertes, todo aquello de lo que podemos sentirnos orgullosas; os invito a repasarlo, para que nunca se nos olvide. Aún sigue de plena actualidad, y aún firmaría cada palabra que dije.

Por eso, porque sigo creyendo que somos ganadoras, es preciso fijar nuestra atención en lo que dentro de nuestro triunfo nos hace menos grandes. Justo en este momento, efectivamente, ya que después de seis meses me doy cuenta de que si bien seguimos avanzando, no siempre sabemos hacia dónde. Por otra parte, en los últimos años hemos acumulado no sólo éxitos, sino también errores –como es lógico y natural. Pero aún siendo previsibles, no por ello debemos quedarnos de brazos cruzados, viendo cómo desequilibran una nave que podría llegar al mejor de los puertos, sin esa rémora; o que podría naufragar, si nos obstinamos en no querer ver lo que tenemos delante.

Ciudadanos de Fandomium, habitantes del Planeta Slash: este Editorial habla de Revolución, lo que según la RAE es el cambio rápido y profundo en cualquier cosa, así como el cambio o transformación radical y profunda respecto al pasado inmediato, según la Wikipedia. De Revolución habla el deslumbrante artículo que ha escrito Mullu para esta edición (Fandomium > Artículos), que os invito a leer en primer lugar, junto al resto de material, porque este número viene muy bien en Fanservice -por Slash Fever-, en la presentación de un nuevo fandom -por Naru-, y otros artículos de calidad. Para poner el broche de oro contamos con la participación de nuestra lectora Veroboned, que como invitada de lujo presenta su visión de un tema que nos ha preocupado a todos en algún momento de nuestra vida de slashers.

Y de Revolución, con mayúsculas, quiero hablaros yo también.

Hemos llegado a un punto en el que necesitamos no sólo ideas, sino también enfoque y dirección. Sigo creyendo más firmemente que nunca en nuestras posibilidades y en nuestro potencial, que se vería asegurado si supiéramos hacia dónde dirigirnos, y de paso elimináramos esos puntos negativos que no sólo degradan nuestro entorno, sino que nos restan energía para seguir avanzando. No me molestaría en hablar sobre ello si no creyera en nuestras capacidades: no se dialoga con los casos perdidos. Una amiga no es esa persona que te dice a todo que sí, con sumisión bovina, sino quien te señala tus defectos, para que no vuelvas a cometerlos. Últimamente no me llegan buenas noticias del fandom de HP en el ámbito hispano. Varias fuentes externas (por su pertenencia a otros fandom) e internas me han comentado que en LJ hay poco HP, y que lo que hay no es como para tirar cohetes, precisamente. Amigas, es momento de actuar, porque me consta que lo que dicen es desgraciadamente cierto. Y si tenemos que escoger una dirección y un modelo, me gustaría hablaros de lo que he visto y he vivido en el ámbito del fandom inglés, que para mí es un modelo idóneo.

Atención, no estoy proponiendo que copiemos aquello, como si nosotras no tuviéramos nuestra propia valía. Nosotras hemos de mantener nuestro estilo, o crearlo, si aún carecemos de él, pero tengo muy claro que en todo caso, esta revisión debe darse dentro de nuestra propia Revolución. La nuestra, no la de nadie. Precisamente porque nuestras ventajas derivan de nuestro carácter, pero también nuestros problemas, que son básicos, seculares, y que sólo cambiarán echándole tiempo, ganas y determinación. El carácter hispano, que detenta grandes cualidades, también implica grandes defectos: sólo nos movemos por dinero (y lo justo), tenemos un complejo de inferioridad hondamente arraigado que nos lleva a desestimar cualquier iniciativa demasiado innovadora, somos envidiosos y destructivos cuando nos sentimos menos que el vecino, somos informales, desorganizados e incumplidores con la palabra dada, y tenemos una capacidad inmensa para vendernos al mejor postor, a la mínima que nos dan oportunidad ¿Eso puede cambiar en el ámbito del fandom? Por supuesto; nada es irrecuperable. Pero hemos de hacer un esfuerzo extra porque lo que el slash hispano necesita de nosotras para perdurar no nos viene de serie.

¿Qué precisamos, pues? Me gustaría repasar qué cualidades y ventajas he descubierto en el fandom HP inglés, y comparar con lo vivido aquí. Recientemente una persona querida me dijo: Heiko, con lo que me has contado, ahora pienso que no conozco realmente el fandom inglés, porque me parecía que debía ser como el nuestro. Nada más lejos de la realidad. Estamos aún muy lejos de alcanzarlas. ¿Qué tienen ellas para llegar a dónde han llegado? Veámoslo. Y, si alguien más conoce el mundo slash inglés y/o americano, por favor, no dude en aportar su punto de vista, experiencia y observaciones. Nuestro correo está a disposición de todas nuestras lectoras, y no dudaré en ceder espacio a quien quiera ampliar el tema o corregirme en lo que crea conveniente.

 


Mayor inversión económica

Dividida principalmente en dos sectores:

Inversión en hosting y desarrollo web. Gracias a ello crean buenas plataformas sobre las que proyectar importantes proyectos. Sé que se mueven en su mayoría a través de medios gratuitos, pero también es cierto que se pueden gastar 300 dólares en un dominio anual. Siendo así, es posible soportar buenas bases de datos y el tráfico que de ellas se derive.

Comisiones. La gente paga a las fanartistas, ocasionalmente, como parte de su trayectoria y vida de slasher. Muchas veces dibujan por amor al arte, algunas, a cambio de una cantidad. El precio de un fanart, de una autora reconocida oscila entre los 30 y los 100 dólares, dependiendo de figuras, fondos, colores, tramas, etc. Suelo hacer negocios con ellas con cierta frecuencia, y nunca he tenido motivos de queja. Allí es una actividad normal, que después de tantos años de ejercicio se encuadra dentro de la más absoluta rutina. Es también un medio de apoyo al fandom y a las fanartistas, que así pueden sostener una afición que tal vez de otro modo no desarrollarían, porque las buenas ilustraciones requieren material y tiempo para ser realizadas.

Aquí aún consideramos que invertir dinero en fandom es dinero perdido. Gastamos igual de tontamente a diario en mil cosas, aún más efímeras, pero sólo se mira con cara rara a quien dedica dinero a un dominio o a una comisión. A veces me preguntan cuánto me cuesta mantener Intruders y resto de proyectos, y yo suelo contestar: anualmente, menos de lo que te gastas en dos fines de semana. Junto a la inevitable pregunta: pero, ¿qué obtienes de ello? Es una inversión de la que no sacas ningún beneficio, al revés, pierdes dinero. Si, bueno, como pasa con todas las aficiones, a no ser que las conviertas en profesiones (véase aficionados al deporte que requieren material para practicarlo, a la fotografía, a meter maquetas canijas de barcos en botellas…). Así que no se trata de que aquí nunca tengamos dinero, porque haberlo haylo, otra cosa es que nos parezca mejor gastárnoslo en fumar que en mantener un dominio. Yo no sé si es por mezquindad, directamente, o porque resulta muy cómodo abrir una comunidad en LJ. Con todos mis respetos para este ámbito (yo misma tengo comunidades, y buenas amistades en el sector), hay que reconocer que hay poca inversión en todo lo que se salga de las funciones de arreglar un sidebar o tagear. Es gratis, y requiere un mínimo esfuerzo, ¿para qué más?

Pues así nos va, amigas. Porque nunca salimos del “¿para qué más?”.

En cuanto al tema de las comisiones, es posible que en parte no haya infraestructura autóctona, porque hay que reconocer que son bastantes menos aquí que allá. Pero se puede, si se quiere. Yo he comisionado fanartistas en el ámbito hispano, y en adelante, para apoyarlo aún más procuraré incluir más fanart de autoras hispanas en Intruders. Me han criticado que siendo un medio en castellano, dirigido al fandom español, incluya tan pocas autoras “de las nuestras”. Por eso mismo me comprometo a rectificarlo, pero con actos, no con palabras. Ni todos los avatares pueden equipararse a una portada en Intruders. Eso es lo que pienso ofrecer a las fanartistas hispanas. HECHOS. Y auténtico respeto.

 

 

Profesionalidad

Eso que nos resulta tan incómodo de escuchar, ¿no es cierto?

He visto que el fandom british es un lugar de encuentro, de intercambio. Un espacio creativo. Y quienes desempeñan una actividad lo hacen con un mínimo de seriedad y compromiso. Igualmente, desarrollan una conducta pública de acuerdo a su categoría, quienes la poseen de verdad. Son artistas, auténticas slashers. Porque además, son conscientes de que eso comporta una serie de condicionantes más allá de soltar un fanfic o un dibujo, cada cierto tiempo, y lo asumen y lo llevan adelante con todas las consecuencias. Parece ser gente que se viste por los pies, y de una vez. Quien es una figura pública, se comporta como tal, siempre. Se podría decir que se toman realmente en serio lo que hacen. Mientras tanto, se lo pasan muy bien, porque aquí se viene a eso, a pasarlo bien; pero no entra en sus planes primero publicar un fic y luego irse a hacer el burro por otro lado, ni la gente se lo toleraría, por muy bonito que el fic resultara ser. Allí, un fanfic no proporciona patente de corso.

El fandom inglés es un lugar sostenible donde las iniciativas y proyectos se realizan y mantienen en el tiempo. Donde si alguien hace algo positivo para la comunidad, se apoya. La gente viene educada y civilizada de sus casas, y es un sitio en el que las fans tienen formación, edad suficiente (mental y de la otra), y trabaja unida para sacarlo adelante. Son proactivas y tienen un objetivo común: aportar su experiencia vital para hacer más grande su entorno. No vienen esperando que el fandom les aporte a ellas otra cosa que no sea entretenimiento (y porno). He visto profesionales de todas las ramas: jueces, abogadas, informáticos... Son estudiantes de medicina, de ingenierías, de literatura, de arte. Solteras o casadas, con o sin hijos, menores de veinticinco o de edades por encima de los cuarenta. Tienen una familia, o no la tienen, pero se ven sujetas por nuestras mismas responsabilidades, limitaciones, preocupaciones, e intereses de vida muggle.

Como nosotras. Sin embargo, es gente que te da muy pocas excusas, y muchos resultados.

La consecuencia de tanta industria y seriedad (en el mejor sentido), es que el ambiente es bastante bueno, y que a estas alturas tienen recursos ilimitados. He dicho bien: ILIMITADOS. Todo lo que está inventado está ya en el fandom inglés y americano. Todo. Prueba a imaginar algo: allí está ya hecho. Lógicamente, tras diez años de fandom trabajando en concordia, y con constancia, es lo que se podía esperar.

¿Qué encuentro aquí? Lo mismo, en muchas áreas y personas. Pero en no menos casos, el fandom se ha convertido en lugar de desahogo de frustraciones y carencias. Hay quien viene aquí a intentar compensar lo que falta en su vida, en su personalidad, en la realización de sus aspiraciones. Amas de casa no muy contentas con sus circunstancias, estudiantes hartas de que les casquen ceros por su ortografía, o gente que en su vida muggle ni es ni será nunca nadie acude aquí a ver si se hace famosa o consigue que una ristra de niñas le diga cuantísimo está aportando al fandom. Que es la autora de su vida, que cada cosa que larga en LJ es pura poesía, que va a poner su nombre a su primogénito (incluso si es un chico). Que tiene muchas fans, un millón de comentarios en LJ, en SH, en fanfiction.net, blablabla. Y bla. Lo cierto es que es todo un mundillo dentro de lo que es el mundo del slash, digno de estudio.

Pues qué pena. Porque al fandom se viene a dar, no a esperar nada de nadie. Está muy bien que todo lo anterior suceda, cuidado: pero es, o debería ser, incidental y muy tangencial, no un objetivo.

Igualmente, lloronas y quejicas tenemos para parar un tren. Aunque esto, mira por dónde, lo compartimos con el resto del frikismo hispano, sea cual sea el fandom en el que se milite. Los hispanos somos llorones por naturaleza (¿qué otras culturas podrían haber inventado los tangos y/o ese flamenco desgarrado y profundo donde se sufre con tanta alegría?).

Encuentro dos tendencias predominantes:

a) “Siempre negativo, nunca positivo”. Hay quien no ve nada bueno en su fandom o ámbito friki, nada que salvar. Todo son pegas insuperables, defectos irredimibles. El caso es que cuando les dices: "bueno, está bien, enuméramelos, para que veamos cuál es la causa y la solución"... ahí se callan y no te saben dar explicaciones concretas. Son gruñones eternos a quienes no les gusta esto, pero, ¿qué les gustaría, entonces? ¿Cómo? Lo que hay no les vale, pero tampoco ofrecen alternativas. Si intentas averiguar la causa de su malestar se pierden entre negros nubarrones de protestas y reniegos. Y todos los fandom y todo espacio friki tiene de todo, a decir verdad, no sólo puntos oscuros: hay muchos pros y muchos contras, sin más. Pero estos, si van a un rol, todo les parece mal: los master, el lugar elegido, su trama, la trama del vecino. Si están en un foro, todo es un horror: las admin y las moderadoras, su organización, las contertulias, las actividades. Los concursos, vengan de donde vengan, están todos amañados sin remedio, por supuesto, y el jurado comprado desde que sus integrantes hicieron la Primera Comunión. La saga de HP es papel de envolver bocadillos, desde el primer libro hasta el último, de hecho, la autora los ha escrito para jodernos vivos. Sus compañeras de fandom, todas estúpidas sin remedio: no se salva ni una. Y con esto y un bizcocho se van sentenciando que "aquí no hay nada que hacer", que "todo está fatal", pero si escarbas un poco en su trayectoria friki encuentras que nunca han hecho gran cosa para ayudar a remediar tanto desastre. ¿Qué hiciste tú en cuanto a eso que te pone de tan mala castaña? ¿Ayudaste en el foro? ¿Hablaste con los master para comentarles tus problemas? ¿Probaste a mejorar tu técnica, a ver si así la próxima vez ganabas tú el concurso? Si no te gusta el canon de tu fandom, ¿has probado a escribir buenas historias basadas en él, que nos ofrezcan una realidad alternativa? Ah, pero nunca tienen tiempo para ello, nunca se ponen, nunca dan con el momento apropiado. Mi teoría es que en el fondo, disfrutan de la queja y pataleo, y no les haría mucho avío que desaparecieran las causas de sus berrinches. ¿De qué se iban a quejar, entonces? Pues nada, majo, a pasarlo bien.

Escollos hay bastantes, ciertamente, no seré yo quien cierre los ojos ante la realidad. Pero no nos podemos eternizar lamentándonos sin hacer nada porque entonces, entonces sí que no avanzaremos nunca, y será cuando de verdad tengamos motivo para lamentarnos.

 

b) Tipo emo. Hay otra categoría de lloronas, que es la más divertida, porque permite apuestas y porras entre quienes las observan. Son las que se quejan no una, sino mil veces, en público y a grandes voces, de sus propias circunstancias; cosa que sería normal si no fuera porque ni salen de ahí ni hacen nada para modificarlas. En HP y en cada rincón friki hispano hay una de estas, por lo menos: es tan común que empieza a adquirir rango de figura folklórica tradicional, así que no podría mencionar un sólo fandom que se vea libre de esta lacra.

No me refiero a personas que cuentan un problema puntual, o que pasan por una concretísima mala racha. Eso nos ha sucedido a todos, y a veces se cuenta, a veces no, dependiendo de nuestro ánimo y tiempo. Me refiero más bien a las instaladas en el drama perpetuo, que en el fondo es otro recurso para llamar la atención y conseguir unos cuantos comentarios en su blog (a estas, en el fandom inglés, las llaman comment whores y todo el mundo se parte la caja con ellas). Las quejas suelen girar siempre en torno a lo mismo: qué pena que nunca seré una verdadera escritora. Qué pena que ya nadie me lee ni me deja reviews. Qué pena tan gorda que dibujo con los codos, y lo sé, pero a ver si quejándome viene alguien y me dice eso de “no, mujer, que lo tuyo está muy bien”, porque desde luego, ganas de trabajar para mejorar, no tengo, pero sí me gusta eso de que una semidesconocida me haga un mimito. Qué terrible existencia la mía porque ya nadie me hace caso. ¿Me habéis olvidado? Me voy a llorar un poco, porque no recibo los suficientes comentarios ni parabienes, tanto como los merezco, porque los merezco muchísimo sin lugar a dudas, a ver si así cuela y alguien pica y viene a darme unas palmaditas en la espalda, o me hace un regalito, o me cuenta el cuento de que el fandom se caerá si yo no estoy aquí. Mira que si no, agarro y me voy, ¿eh?

Pues mira sí, vayámonos, pero de una vez por todas. El fandom no se cae si ninguna de nosotras estamos aquí. Igual hasta mejora, fíjate por dónde. Cuando vosotras y yo nos vayamos, vendrán otras que seguirán adelante, y lo harán mucho mejor, o eso espero, porque si no hay reemplazo ni evolución, vamos listas de papeles como comunidad slash hispana. Así que llora, quéjate todo lo que quieras, haz todo el teatro que se te pase por el melón y chantajea emocionalmente a tu flist hasta la náusea: pero tus fics seguirán sin escribirse, tus dibujos, igual de mediocres, tu página, igual de pobre, tu foro, igual de limitado, tu vida, igual de lamentable. Da igual que ventiles tu intimidad con mucho aspaviento, es lo mismo que vendas tus desgracias ante una audiencia que te va a pasar la mano por el lomo, a quien no le cuesta nada mandarte un privado, un correo, hacerte un avatar. Total, es gratis. Pero lo auténtico, lo que es de verdad, tiene lugar en la intimidad de cada uno. La intensidad es una cosa silenciosa, contenida, y en modo alguno espectacular. Por ello, tanta tontería no forma personas dignas ni integrantes de calidad dentro de un fandom. Sólo genera, en el mejor de los casos, espectáculo. Y venga, y dale con el mismo cuento una y otra vez, y la gracia es que siempre tienen a alguien debajo que se traga la artimaña y que les aguanta el rollo macabeo. Te vas un rato, vuelves al cabo de un mes, dos, tres, seis meses, y siguen con la misma gaita. Qué pena de vida, ay cómo me duele, dame argo, paya.

Y las otras pobres, esas que siempre están a la zaga, que nunca faltan, van y se lo dan XD

 

Cada vez que veo una de estas me acuerdo del esmirriado de Sé lo que hicisteis. "Ay, qué me secuestraaaaaan...". No os lo perdáis en vivo y en directo. Talcualmente. (Gracias a Matrinforthewin por el vídeo).

 

 


Me gustaría recordar aquí unas palabras de J. G. Arnau, a propósito de algunos jugadores de fútbol y su actitud de eterna queja, que vienen muy al caso (el subrayado es mío):

En la práctica, cualquier jugador ha de considerarse un privilegiado. Y mira por dónde que, por lo que oímos y vemos, algunos, jaleados por sus representantes, afirman que se les trata injustamente y que su envoltorio, que habría de ser de algodón, está hecho de espinas. Esto es falso y carece de originalidad, porque en la vida sucede lo mismo: los que pudieran tener motivos para quejarse no se quejan, y los que se quejan lo hacen sin razón. Además, se repiten, y lo que sueltan hoy aquí, mañana lo soltarán allí. Que se dejen el pellejo en cada partido y que obvien esas monsergas de todo a cien. Cuando se rinde o se intenta rendir al máximo uno está en su derecho de protestar, aunque la gente que siente los colores jamás abre la boca. Más gasto muscular, chico, y menos darle al pico. El maltrato es un mal asunto, y a ti nadie te maltrata. Ponte al habla con un fenómeno de pies a cabeza y te contará que para llegar a crack hay que demostrarlo (todo el rato y no a ratos).

Marca, 15-08-2008

 


En el fandom inglés no hay llantinas, porque a las lloronas se las acaba arrinconando en beneficio de quien hace cosas “de verdad”. He visto marcharse del fandom inglés a grandes autoras, autoras de las de verdad. Siempre es una pérdida dolorosa. Y se van una vez, no cincuenta: exponen sus motivos con calma, dicen adiós, dan las gracias a todo el mundo, con sencillez, y luego se retiran elegantemente. No montan el circo tres veces al año, con merienda, plañideras, aplaudidoras y fuegos artificiales incluidos.

Amigas, o caminamos o no, la decisión es nuestra: pero si decidimos no esforzarnos lo suficiente, no nos quejemos de lo que no tenemos. Quédate o vete, pero deja de manipular a quienes te siguen. Haz lo que quieras, porque ni el mundo del fandom ni el del slash se cae porque nosotras dejemos de estar en él. ¿Nos vamos? Pues hale, nos vamos. Pero si te quedas, y decides seguir sufriendo, ahórranos las monsergas. Sangra en silencio.

 


Madurez

Como fandom y como slashers. Que mencionara la edad mental y formación de las integrantes del fandom inglés no es casual, sino muy importante. Tienen un concepto de lo que es “convivencia” que a nosotras nos supera ampliamente. Allí rigen las mismas normas que en su vida “real” o muggle: la que es educada fuera, también lo es dentro; quien no hace barbaridades fuera, no tiene por qué perpetrarlas aquí; quien sabe mantener una palabra dada, también tiene la misma capacidad en fandom, etc. Por tanto, han creado un clima general de concordia y productividad que ya lo quisiera para sí el sector empresarial japo. Son buenas, muy buenas, también en lo tocante a civismo y urbanidad, dos palabras que desgraciadamente ya no se llevan, pero que allí están de plena vigencia. Como consecuencia, la gente es educada, se trata con cortesía, no hace el cabra en LJ ni lo utiliza como un arma, si se compromete con una persona a hacer algo, lo cumple, y respeta los derechos ajenos.

Aquí nos toca aguantar, cada cierto tiempo, comportamientos no sólo de poca educación, sino incluso vandálicos. Y desde luego, de lo que te dije hace un mes que te iba a dar hoy, olvídate, que es que de repente ya no tengo tiempo. Esto pasa porque es “algo de internet”, algo para pasar un rato muerto, tal vez, y porque a quien has ofendido o faltado o lo que sea, no la vas a tener nunca delante para suministrarte eso que tu padre no te dio en su momento (y así vas por la vida). Conozco dos personas que proponen distintas hipótesis para explicar este fenómeno: mi mejor amiga dice que quien se conduce de un modo aquí, es porque fuera también tiene la misma personalidad. Es decir, que al principio de tu vida te reparten unas cartas y esas son las que juegas durante toda la partida, en tu vida muggle y en tu vida de fandom. Otra propone que se trata de personas que hacen aquí lo que nunca les permitirían fuera, o bien que dado el relativo anonimato del medio virtual, no dan importancia a las relaciones y tratos que crean en él.

Tipologías de monstruito friki hay varias, pero mencionaré dos que han llamado mi atención:

-Wankers. Aparecen, chillan un poco, y desaparecen, como las arpías. ¿De dónde salen? ¿Alguien lo sabe? ¿Cómo se crean? Que venga Iker y nos diga algo, porque no conozco a nadie que me haya sabido dar una respuesta. Esto es como lo de las caras de Bélmez, pero en tontorrón. He visto a personas normales digievolucionar en wanker con una rapidez pasmosa, pero otras surgen de vaya usted a saber dónde, porque parece que vienen así de fábrica. Habitan en LJ –con nombres y apellidos, transmutadas ocasionalmente en wankers-, o en las comunidades de secretos, en plan anonimato. Se manifiestan más o menos así:

Que si necesitas un hombre, que si os casáis entre vosotras, que si asesinas, que si no tienes vida, que si te ha salido una teta en la espalda, que si eres una tirana, que si tú fuiste la que se cargó a Michael Jackson, que si eres fea y tu página también, que qué mala eres, que si me pegaste y me secuestraste, que si eres nazi, que si….

Que sé yo. Su fraseología es inacabable, pero toda gira en torno a los mismos temas. Más o menos viene a ser la evolución siglo XXI del “caca-culo-pedo-pis” de cuando teníamos diez años. La escuela wankeril hispana es reiterativa y dada al tópico, porque imaginación tienen poca, y si la tuvieran, en vez de al wank se dedicarían a algo productivo. Son más de una y suelen ir en grupitos: la primera lo larga y las demás jalean. Al principio sorprende, luego se suele arreglar con un “anda, ya están ahí las de siempre, mira, hacía mucho que no nos tocaba”. Es curioso, porque cada medio slash suele tener las suyas, como un ecosistema propio. Como se las tiene muy vistas, acaban siendo elemento pintoresco y ocasión de risas dentro de las respectivas directivas. No sé por qué surgen. Por mala leche y envidia, porque les lleva el demonio que sigas ahí, porque has sobrevivido a ellas y a todo, porque tú eres mejor, porque su vida personal es una soberana mierda, quizás, y como no le pueden gritar al banco ni a su jefe, ni a su marido, ni pueden deshacerse de sus pesadísimos hijos, o tal vez les han suspendido hasta en lo que no se habían matriculado, en algún lugar y con alguien tendrán que desahogarse. Digo yo (se aceptan hipótesis).

 

 

 

No, en serio, ¿nunca os habéis preguntado quién hace los chistes y los power point? ¿Quién los difunde? ¿Por qué nadie reclama derechos de autor? ¿Está la CIA metida en esto?

 

 

-Integristas del slash: esto lo he visto en mayor o menor medida en todos los fandom, según los pairing autóctonos. En el de HP tengo amigas queridas que sólo pueden leer y escribir Snarry, y de ahí no las sacas. Tengo amigas queridas que sólo leen Harry/Draco, y no pueden con otra cosa. Tengo amigas queridas que sólo tragan el Sirius/Remus. Y amigas queridas que están tan a gusto con sus ultra-rarefics y no tienen en mente escribir nada tan vulgar como un Retrato de Dumbledore/Espíritu de Dobby. Todo me parece bien, muy respetable, porque ellas a su vez respetan lo de la vecina. Grandes artistas las hay de todas las tendencias y pareceres, y cada quien tiene sus límites. Yo también tengo los míos (si, los tengo XD). Lo importante es respetar lo ajeno tanto como lo propio, y considerar que el resto de pairings están igual de bien, para quien lo están. Que no podamos disfrutar de ellos no los hace inferiores, sólo diferentes.

Pero hay otras, que por suerte son minoría, que van por ahí diciéndole a la gente lo muy malo que es tal o cual pairing, el que sea que le tienen manía dentro de su fandom, en oposición al suyo, que es único y maravilloso y el que debería imperar sabe Dios dónde, porque creo que ni ellas tienen claro qué lugar ocupan dentro del fandom ni del mundo del slash, ni apenas dónde están. Ponte tú a averiguar lo que pasa por el batiburrillo de su destartalado coco. El caso es poder imponerle algo a alguien –a las que se dejen- porque seguramente en su vida muggle son ellas las que tienen que agachar la cabeza a todas horas.

Amigas, os diré que si bien es valioso que haya apasionadas del pairing de cada una, el que sea, tolerar integrismos nos empobrece como colectividad. Que nadie os diga lo que tenéis que leer o escribir, lo que tiene que gustaros. “Es que lo ha dicho Fulana de Tal”. Ah, ¿es que tú vales menos? Te aseguro que nadie, absolutamente nadie, es mejor que tú. Y desde luego, no necesitamos basura integrista aquí. No dejéis que os la coloquen porque os merecéis un ambiente sano y constructivo, os merecéis libertad de acción y de elección. Explorad todo el slash, todos los fandom, todos los pairing. Que no os la cuelen por el otro lado. Sois jóvenes y estáis vivas, no podridas por dentro: así pues, demostradlo.

 

 

Movilidad

Es increíble lo mucho que se mueve esa gente. En el fandom inglés y americano, en ambos, todo el mundo llega a donde se propone, teniendo, igual que nosotras, mismas posibilidades y realidad muggle (estudios, familia, economía, etc). Sus infraestructuras convierten el fandom, sector slash, en una auténtica metrópolis moderna, donde podemos encontrar muchos y variados recursos, así como actividades: convenciones, simposios, hasta iniciativas caritativas. Hay viajes, encuentros, congresos.

Aquí aún no hemos salido de las dimensiones y mentalidad del pueblecito de provincias. Para no movernos, presentamos un cúmulo de excusas continuas y muy pocas soluciones. ¿Por qué no se hace Tal Cosa? Ay, es que tengo catorce hijos. Ay, es que tengo que estudiar tres carreras. Ay, es que mi ordenador se ha roto. Ay, es que no tengo tiempo. Ay, es que no tengo dinero. Ay, es que vivo muy lejos. Ay, es que mi novio no me deja. Ay, es que me da mucho corte. Ay, que Júpiter está en conjunción con Urano y me va mal por el tema de los biorritmos. Yo no sé qué pasa que parece que todas somos ministros de algo y estamos siempre liadas arreglando algún tema de interés mundial. A ver si es que ha venido Zapatero a reclutar a todo el mundo y yo no me he enterado (¿¡por qué nadie me avisó!?). Allí, les falta tiempo, pero para montar catorce saraos anuales. Aquí, cuando hay una quedada, una vez al año, encontramos mil pegas para no ir. Cómo vamos a pensar en salir del estado de pueblito bicicletero y emprender algo más grande. Normal.


Relevo generacional

He asistido a una nueva hornada de slashers en el fandom inglés y americano. Se han sumado a las que ya existían, y han aportado creatividad y sangre nueva, respetando a sus predecesoras. Eso es bueno: mantiene vivo el sistema.

Aquí seguimos las mismas de siempre, por lo que veo, o más o menos. Me di cuenta de esto conversando con una persona sobre el tema de los concursos. Nos preguntábamos qué pasaría si se convocara ahora un concurso que evaluara quienes son las personalidades más destacadas en todas las ramas del slash hispano (ojo, me refiero a un concurso serio, como los de toda la vida, con sus jueces, categorías razonables, etc, como son el 90% de los concursos que tienen lugar en el mundillo slash hispano; no de estos concursitos en los que la admin tiene que pagar favores de promoción prestados y se dedica a repartir banners a diestro y siniestro sin mucho sentido, inventándose de paso las categorías). Hace tiempo, bastante, hubo uno para elegir a las mejores autoras. Fue un concurso digno, bien pensado, sin ninguna sombra de duda respecto a su desarrollo y veredicto. De esto hace, ¿cuatro años? Pues bien, miro a mi alrededor y constato que de tener lugar actualmente, ganarían las mismas. Hay que fastidiarse, amigas. ¿Queréis concurso? Ya os digo yo lo que saldría en los primeros puestos: Irati, Livia, Helena Dax, Hojaverde, Mullu, Alastor, Abysm. Hale, ya hemos tenido concurso, ¿os ha gustado? Vamos a hacernos la foto, y para casa.

Personalmente, me parece signo de lo poco que cambian los tiempos, lo cual es sinónimo de falta de evolución y eso NO nos beneficia en absoluto. Cuánto me gustaría estar equivocada, y que de celebrarse un concurso como aquel, las autoras de entonces compartieran podio con otras nuevas.

Muy sintomático, igualmente, es que los jurados de los concursos siempre seamos las mismas. Fui jurado en aquel y he repetido en diversas ocasiones a lo largo del tiempo, y salvo en el sector de los originales, que allí sí parece que hay más movimiento, en el resto nos vemos las mismas siempre. Como me decía una: “Heiko, si es que por aquí no surgen caras nuevas”. Pues va a ser que no.

 

Nah, pero sea como sea, se pasa muy bien ;) Apañeras jurados, un abrazo desde aquí :*

 

 

 


Mejor y mayor acceso a nuevas tecnologías

Durante mi estancia en Londres me fue muy fácil conectarme a la red cuando quería. Que no lo hiciera tanto como me hubiera gustado debo achacarlo a lo trashumante de mi estancia, y a lo insistente de las amigas del fandom autóctono por llevarme de un lado para otro (las que no se habían ido antes a Azkatraz, claro está). No sabéis lo sencillo que es conseguir una conexión a internet, en cualquier parte. En casi todos los locales puedes sentarte, pedir un café y conectarte con tu portátil. A veces pillas red hasta en la calle. Tengo entendido que a nivel doméstico, las conexiones son decentes y los precios, justos. Pero es un estado que se da en toda Europa… en toda, menos en nuestro país, y no digamos ya en países hispanos, eso sí que es una tragedia sofóclea. Comparemos: alquiler mensual de conexión y router en Francia: quince euros. Mismos servicios en España: hasta 60 y 70. Sobre la atención al cliente, ¿he de extenderme mucho? Por mor de la concisión yo lo calificaría de auténtico timo. Y es lo mismo que te muevas de una compañía a otra, porque la que tiene el monopolio bloquea los accesos de las demás en tu nueva conexión (o intento de conexión).

Esto influye mucho a la hora de que una fan potencial tenga acceso al mundo friki, porque casi todo se mueve a través de Internet, o al menos, es el sitio para llevar a cabo el primer contacto. Y si a la gente le cuesta tener una conexión decente para meterse en una comunidad, ni pensar en montar una página, claro. He ahí una de las causas de nuestro retraso. Estoy convencida de ello.

De esto no tenemos la culpa, en principio. Sin embargo, hay que reconocer que llevan la tira de tiempo timándonos y tampoco es que nos rebelemos mucho, ¿eh? Protestamos en nuestra casa, pero de ahí no sale el berrinche. Nos movemos de un sitio a otro, nos van timando de compañía en compañía, nos vamos llorando de la naranja a la verde y luego a la azul de nuevo, pero os juro que esto que nos están haciendo es para liarla pardísima, a lo revuelta popular, pedradas incluidas. Pero no tiene pinta de que vayamos a seguir haciendo otra cosa que no sea aguantar en silencio.

 

 

Variedad en fanfiction

En el fandom inglés y americano hay de todo: porno y fluff, historias domésticas y bdsm, drabbles y sagas de dimensiones épicas. Absolutamente todas las variantes. Hay de todo para todos los gustos, en todas las temáticas, dimensiones, tendencias. La fluffer tiene su sitio, pero también aquella a quien le gustan los fics de sexo en grupo, el mpreg, los relatos familiares y convencionales (matrimonio incluido)… Nuevamente, todo lo que busques lo encuentras allí.

Aquí tenemos mucha menos variedad. El drabble predomina, ¿dónde están las historias largas? No digo que no las haya, sino que están en franca minoría frente a un formato que es fácil de escribir y no requiere grandes quebraderos de cabeza. Me gusta un buen drabble como a la que más, pero no sobreviviremos como fandom si todo se reduce a estas viñetas ocasionales.

Tampoco hay mucho riesgo en los temas de las historias que se tratan, pero sabéis que tiene que haber espacio para todas. Se están haciendo intentonas de meter más porn en el fanfiction hispano, así que genial, viva y bravo, pero no sólo no es suficiente, sino que aún hay quien protesta. Hay que ver: en ocasiones he encontrado comentarios en contra que parecían sacados de la serie de los Alcántara. Y no digo que esto tenga que ser lo que predomine, sino que lo ideal sería encontrar un equilibrio. Me gusta la faceta más hard del slash, pero si lo que nos faltara fuera fluff, igualmente lo señalaría. Variedad, eso es lo que propongo. Tocando todos los palos crearemos un fandom vivo y rico, donde todo el mundo encontraría espacio para desarrollar su propia visión del mismo.

 

Capacidad de autocrítica

En el fandom inglés, cuando algo está mal, se dice. Si algo no es correcto, se expresa. No se incentiva y fomenta lo que no está bien. Nadie hace la pelota a nadie, porque no les pagan por ello, y porque se respetan a sí mismas. Y es que, amigas, las slashers de verdad, como ellas, no tienen ama.

Aquí nos tragamos todo lo que nos echen sin una palabra, tanto lo maravilloso como lo que se cae por todas partes. Nuestra capacidad crítica es nula, inexistente. Está completamente atrofiada. Vamos a ver, ¿sabéis cuál es el significado de la palabra “impecable”? Según la RAE, en su segunda acepción, significa “Exento de tacha”. Id a ver de nuevo eso que habéis calificado como tal, y mirad a ver si coincide con la definición.

No digo que lleguemos a lo de las Ejecuciones Sumarias de MacTabby (para asumirlo con la madurez y sentido de la ironía necesarias nos faltan dos vidas), ni que lo soltemos a lo bestia, porque no se trata de eso; y desde luego, hay que agradecer que haya gente escribiendo, dibujando, traduciendo, poniendo comunidades y foros para nosotras. Pero yo, cuando veo algo que no me cuadra, al menos me callo, o proporciono, de buenos modos, alguna idea sobre cómo se podría corregir el fallo que he localizado. Desde luego no corro a decir que es una obra maestra. Más capacidad crítica redundaría en que nuestra calidad global aumentara. Hagamos un esfuerzo: sobre todo porque estoy harta de que en los últimos meses no hagan más que recordarme la baja calidad del fandom de HP, y se me están acabando los argumentos.


Extensa tradición friki

Finalmente, tal vez esta sea la causa radical de la que se derivan el resto de problemas.

En el ámbito angloparlante, el frikismo como movimiento paracultural, o integrante de la cultura popular actual data de los años 60, con el surgimiento de Star Trek. Igualmente, el slash surgió en esa época. No obstante creo que desde mucho antes hubo algo parecido, desde los escritores pulp de ci-fi, que ya celebraban convenciones de autores y fans. Por tanto, encontramos que allí tienen asimilado y reasimilado todo lo que se deriva de lo que llamamos frikismo como un rasgo más de su ocio y de su cultura.

En España nos enteramos de que existía el slash en esta década o tal vez a finales de la anterior, y ponernos a funcionar como slashers nos llevo unos cuantos años más. Ahora mismo sigue siendo algo ante lo cual nos encontramos con caras de espanto, ceños fruncidos y narices arrugadas; eso, cuando nos atrevemos a contar lo que somos y lo que hacemos en Internet.

Hay que reconocer que meter frikismo en España, y no digamos ya en Hispanoamérica, es tarea ardua, porque ni tenemos tradición ni nuestro carácter es propenso a estas veleidades. Tal vez este no sea el mejor caldo de cultivo para el frikismo. Todo lo que no sea familia, trabajo, y las fiestas de nuestro pueblo/comunidad autónoma, lo miramos con sospecha. Uy, qué raro. Uy, qué corte. Para qué perder el tiempo, si no es algo que pueda hacerse con unas cañas en la mano y rodeado de amigotes. ¿Estoy en lo cierto o no?

En nuestro país el frikismo entró a principios de los ochenta, con los juegos de Dungeons & Dragons, los tableros, los tocho-dados, las sepias, las cartas. ¿Os acordáis, generación de los setenta? Bien, a estas alturas, aún sigue siendo un fenómeno marginal y minoritario, muy a menudo comentado con desdén por los que son ajenos al mismo. De los 80 hasta hoy han pasado TREINTA AÑOS. Lo pongo en mayúsculas para que a nadie le pase inadvertido. Treinta años, se dice pronto. Y mirad cómo estamos: nos falta muchísimo para tener una verdadera cultura Freak, una buena convivencia de fandom, una cultura slash común equiparable a la que podemos encontrar en idioma inglés.

El frikismo entra difícil, no vende, o vende poco y con mucho esfuerzo. Con mucho trabajo hemos logrado popularizar los Salones de Barcelona, y ahí van el Expocómic de Madrid, y algunos Salones de otras Comunidades. Pero aún no veo que se pueda considerar verdadero negocio, auténtico elemento de la cultura popular. No me puedo creer que a estas alturas haya aún quien se crea la leyenda urbana de mediados de los noventa según la cual los roleros de vivos vamos por ahí katana en mano cargándonos viejitas en las paradas de los autobuses. Pues aún perduran, no se han extinguido como debería ser ley de vida. Os juro que hace poco le dije a una persona menor de veinticinco, precisamente relacionado con el mundo friki, sector manga: “parece que empieza a haber más movimiento de fandom en España, porque…” y me interrumpió: “¿Y qué es fandom?”. Cojones (con perdón). Me dieron ganas de responder: “precisamente tú deberías saberlo”, pero ofrecí la correspondiente explicación y me quedé preguntándome qué accesos tenemos a este mundillo, ya que sólo nos llega información parcial y fragmentada, de lejos, como el que oye campanas. Pensadlo. Encontrar una respuesta puede suponer parte de la solución del problema.

 


Amigas, ¿tenemos que esperar otros treinta años para que sepamos cómo “utilizar” un fandom y cómo movernos dentro de él? ¿Para asimilar correctamente lo que supone ser slasher? Lo bueno de tener que esperar tanto es que dentro de treinta años habrán desaparecido las wankers, las que toman el fandom a beneficio de inventario, las de la eterna queja, las reinas del drama, las de los secretitos, las de las revanchitas, las de los “concursos” de chichinabo, las integristas, las cobardes, las insolidarias, las que no salen del drabble así las mates, las que no tienen fe en nosotras mismas como movimiento cultural… todas ellas habrán desaparecido. Pero lo malo es que la gente fuerte, curranta, ingeniosa, creativa, decente, educada, con ilusión, o sea, gente con vida propia… esas también se habrán marchado. Ya no estaremos aquí, ni las unas ni las otras. Pero tal vez no dentro de treinta años, sino de, ¿dos, tres? Al paso que vamos, cabe la posibilidad. Y yo no quiero ver cómo eso sucede.

El perdedor es parte del problema, el ganador es la solución: el que gana, sabe que la adversidad es un buen maestro, el que pierde es la víctima de la fatalidad. El perdedor cree en la mala suerte, el triunfador en sí mismo; el éxito no necesita explicaciones, el fracaso no admite ninguna. Por eso, ofrezcamos soluciones a quienes nos piden un cambio.

Así pues, he aquí mis

 

CUATRO PROPUESTAS PARA UNA REVOLUCIÓN

Estas son las mías, pero os invito a que reflexionéis y obtengáis las vuestras. Seguro que son tan buenas o mejores que las que aquí presento. Pero hacedlo, y rápido; porque aquí no va a venir Obama a resolvernos la papeleta (no creáis que no lo he intentado, pero parece ser que este no hace comisiones).

 

 

 

-Reciclaje. Tenemos muy buena materia prima para darle el mejor uso. Y para que así sea, precisamos de un replanteamiento que nos lleve a tomar conciencia no sólo de nuestras fortalezas, sino de nuestras carencias y defectos, para ponerles remedio. Son un lastre. Imaginaos que tenemos un barco de lujo, un Titanic: la mitad va estupendamente, pero la otra mitad está cargada con material prescindible, que hace que se hunda. Hay que tirar por la borda todo lo que nos sobra. No me parece ningún drama: toda sociedad genera material de desecho y áreas marginales, todos los hogares tienen que sacar la basura unas cuantas veces a la semana. Es natural, y nosotras no vamos a ser una excepción. Llevamos años intentando construir, lo cual es genial, pero no nos hemos preocupado de las manifestaciones residuales que hemos creado durante el proceso. Es hora de echar cuentas y hacer balance, para librarnos de lo que supone una rémora en nuestra evolución.

 

-Mayor capacidad de crítica. Agradece y valora lo que te dan, pero si puedes, dile a la owner, admin, escritora, traductora, fanartista, lo que piensas, si algo no te acaba de convencer. Si es en público, con extrema educación, argumentando. Si esa admin/autora no te atiende, es que no le interesas tú, no le interesa el fandom y lo que es peor, no le interesa su propio sitio o trabajo. En cuanto a mí, me gustaría más que mucho que hicierais lo propio, porque no sólo las críticas me han ayudado a evolucionar y me han aportado soluciones, sino que he descubierto auténticos talentos escondidos bajo el aspecto de “lectora que dice que Esto no le gusta”. Y ese es mi trabajo en Intruders, realmente: cazar talentos y hacer que brillen con luz propia.

Aprovecho –ya que estamos- para presentaros a Naeh, nuestra redactora jefe y mi mano derecha. Muchos ya la conocéis. Está en Gerencia desde esta Navidad, cuando las necesidades internas de Intruders me llevaron a pensar que necesitábamos un refuerzo en este área. A ella la conocí así: era una lectora que me envió dos hojas de word llenas de críticas, directamente a mi correo. He de decir que fue muy cortés, y que aportaba soluciones a todo aquello en lo que veía un defecto. Entonces me dije eso de “ha nacido una estrella”, porque Naeh tenía las ideas claras, era decidida, y poseía las cualidades que busco en alguien que ha de estar a mi lado. Los Gryffindor adoramos el valor. Su trabajo en estos seis meses ha sido lo que ha marcado la diferencia entre un buen resultado y un resultado inmejorable. Es un auténtico crack. No sé qué haría sin ella. Actualmente me lleva la contraria varias veces por semana en asuntos importantes, así como si le dieran dinero XD Tengo la impresión de que le ha cogido el gusto y ya no puede dejarlo.

He oído decir “Grandioso”, que es una palabra preciosa (er, gracias ;)), pero aprecio que me cuentes qué te gustaría ver en Intruders y qué corregirías. Así que hale, haz como ella y dime lo que piensas.

 

-Líderes. Necesitamos menos famosas y más líderes. Gente que sepa a dónde va y cómo llevarnos, que marque una dirección. ¿Quién puede serlo? Cualquiera, porque lo que se necesita es nitidez en las ideas y firmeza en los propósitos, así como coraje y búsqueda del beneficio colectivo. Y eso lo puedes encontrar tal vez en ti misma, a lo mejor en la persona que está a tu lado. No necesitas ser conocida, ni siquiera llevar a cabo una actividad notoria en el slash hispano. Dichas cualidades pueden aparecer dónde y en quien menos lo esperamos. Pero eso sí, tened en cuenta algo fundamental: los líderes no lloriquean, no suplican, no se arrastran, no se quejan, no montan dramas, no organizan escándalos, no mienten, no parasitan y no dañan ni a las personas ni al tejido social del fandom.

 

-Nuevos códigos de conducta. Ya es hora de pensar en el beneficio común: ¿conocéis la historia de la mariposa que mueve las alas en una isla remota y termina generando un huracán en Estados Unidos? Si algo afecta a otra persona, llegará a ti un día, es posible que bajo otra forma, pero te aseguro que notarás el efecto del vuelo, o del huracán. Concuerdo con Edmund Burke en que lo único necesario para el triunfo del mal es que los buenos no hagan nada. No todo vale, no todo puede valer. Cuando conversaba con algunos miembros del fandom inglés les contaba lo que hay aquí, tanto lo bueno, como lo malo, como lo regular, y en cuanto a estos dos últimos puntos, lo cierto es que se me quedaban mirando con cara de “no me puedo creer que eso haya pasado allí”. Se asombraban bastante de que toleremos según qué cosas, y de que transijamos con elementos que en su ámbito sólo se dan muy de tarde en tarde, y no suelen prosperar. Necesitamos más agentes reguladores como PLAP, que lleguen a distintas áreas. Que se imponga la educación, la convivencia civilizada, y que se protejan los avances en materia de creatividad. Algo nuevo no es algo que haya que combatirse, sino algo que ha de cuidarse y fomentarse.

 

 


Estaría muy bien que lo hiciéramos. Que lo hiciérais. Pero no por mí, ni porque yo os lo sugiera. No, de ningún modo. ¿Recordáis lo que nos decían cuando éramos pequeños y llegábamos a casa con una retahíla de cates en las notas? Parte de la bronca que recibíamos consistía en el consabido y sobadísimo “tú verás lo que haces, ¿eh? Que yo ya tengo la vida resuelta” (como si un crío de doce pensara en lo que iba a hacer cuando tuviera treinta y fuera ingeniero industrial, dicho sea de paso). Bueno, amigas, yo estoy orgullosa de mi pasado, feliz con mi presente, y segura de lo que haré en el futuro. Sé dónde estaré y qué haré si no hay Revolución, si finalmente el barco se hunde. Tengo mi propio seguro de vida y de jubilación, por decirlo de algún modo, y mi parcelita en el lugar más soleado del fandom. He hecho mis deberes ;) Así que montad esa Revolución por todas, por vosotras, para que dentro de dos años estemos mejor que nunca. Hagamos la Revolución, y yo estaré donde haya que estar, ayudando, con las mismas ganas de siempre. Pienso que soy una de las personas que más cree en el slash en nuestro idioma, y al menos he intentado con todas mis fuerzas aportar lo que he creído bueno para nosotras. Que haya profesionalidad y dignidad como entre las integrantes del fandom HP inglés, que haya la calidad suficiente como para respetarnos a nosotras mismas y para que nos tengan en cuenta en todas partes. No siempre ha sido fácil, porque no siempre das con quien comparte tus ideales. Hay quien prefiere que sigamos revolcándonos en el lodazal para siempre. Esto también es ley de vida, pero imagínate si tengo interés y ganas e ilusión por seguir poniendo de mi parte.

Y sin embargo, insisto: os conviene hacerlo por vosotras. Sacad la basura, tirad de la cadena, deshaceos de lo que sobra. Decía Winston Churchill que “hacemos todo lo que debemos hacer después de hacer todo lo que no se debe”. Que no nos pase. Por supuesto que voy a ayudar en la tarea (revisad nuestra Política, en una de las pestañas superiores). Vengo luchando por ello desde hace mucho, y no lo voy a dejar ahora. Quiero ver a este fandom grande, fuerte, unido. No me cabe duda de que somos capaces de montar una y todas las revoluciones que se nos pongan por delante para conseguirlo, y que llegaremos, si todos ponemos de nuestra parte. Eh, soy Gryffindor, y ya sabéis, somos unos románticos incurables. Creo que el Bien triunfará, que los buenos ganarán, todo eso.

¡Ciudadanos de Fandomium, habitantes del Planeta Slash! No dejéis de luchar. La luz hace que las tinieblas se extingan.

¡Revolución! (y porno).

 

 

Os deseo prosperidad y paz para los tiempos venideros. Que prevalezcamos por siempre.

 

 

 

Este Editorial está dedicado a las siguientes personas:

A la memoria de nuestra compañera Alexandria, fallecida en enero del 2008. A la memoria de nuestra compañera Snarry2008, fallecida en julio de 2009. Personas excepcionales y valiosas integrantes tanto del sector de originales como del fandom de HP. Ellas eran dos líderes naturales.

 

Para Naeh, por ser su primera publicación. Disfrútalo, prima ;)

Para B., más que ojos.

 

 

 

Heiko

 

 

 


(En realidad, lo peor de todo es que aquí no se puede mantener una charla decente sobre Quidditch con nadie. Sólo eso hace que me entren ganas de exiliarme a las chimbambas. ¿Es que nadie sigue la liga profesional? Con la buena temporada que han hecho los Prides…)